Eructos: causas, mecanismos y control

Los eructos, también conocidos como bellos o eructos, son un fenómeno fisiológico común que afecta a todos. Son un mecanismo natural del cuerpo para liberar el exceso de aire que se acumula en el estómago. Aunque los eructos suelen ser inofensivos, pueden ser incómodos y embarazosos en ciertos contextos. Este artículo proporciona una comprensión completa de los eructos, explorando sus causas, mecanismos, factores contribuyentes y estrategias para controlarlos.

¿Qué son los eructos?

Los eructos son la expulsión de aire del estómago a través de la boca. Este aire se acumula en el estómago durante la deglución, la ingestión de alimentos o bebidas carbonatadas, o la fermentación de alimentos en el intestino. Cuando la presión en el estómago aumenta, el esfínter esofágico inferior (EEI), un músculo que actúa como una válvula entre el esófago y el estómago, se relaja, permitiendo que el aire escape hacia arriba.

Causas de los eructos

Los eructos pueden tener varias causas, que incluyen⁚

• Deglución de aire⁚ Tragar aire durante la comida o la bebida es una causa común de eructos. Esto puede ocurrir debido a comer demasiado rápido, hablar mientras se come, masticar chicle o usar una pajita para beber.
• Alimentos y bebidas carbonatadas⁚ Las bebidas carbonatadas como los refrescos y la cerveza contienen dióxido de carbono, que se libera como gas en el estómago, lo que provoca eructos.
• Fermentación de alimentos⁚ Algunos alimentos, como los frijoles, las coles de Bruselas y las cebollas, contienen azúcares que las bacterias intestinales fermentan, produciendo gas que puede provocar eructos.
• Intolerancia alimentaria⁚ La intolerancia a la lactosa, una condición en la que el cuerpo tiene dificultades para digerir la lactosa, un azúcar que se encuentra en los productos lácteos, puede causar eructos, así como otros síntomas como hinchazón y diarrea.
• Reflujo gastroesofágico (RGE)⁚ El RGE ocurre cuando el contenido del estómago vuelve al esófago, lo que puede causar eructos, acidez estomacal y ardor de estómago.
• Síndrome del intestino irritable (SII)⁚ El SII es un trastorno digestivo común que puede causar eructos, así como otros síntomas como dolor abdominal, diarrea y estreñimiento.

Mecanismo de los eructos

El proceso de eructos implica los siguientes pasos⁚

1. Acumulación de aire⁚ El aire se acumula en el estómago debido a la deglución, la ingestión de alimentos y bebidas carbonatadas, o la fermentación de alimentos.
2. Aumento de la presión⁚ El aire acumulado aumenta la presión en el estómago.
3. Relajación del EEI⁚ La presión en el estómago hace que el EEI se relaje, permitiendo que el aire escape.
4. Expulsión de aire⁚ El aire se expulsa del estómago a través del esófago y la boca, produciendo un eructo.

Factores que contribuyen a los eructos

Varios factores pueden contribuir a la frecuencia y la gravedad de los eructos, que incluyen⁚

• Hábitos alimenticios⁚ Comer demasiado rápido, hablar mientras se come y masticar chicle pueden aumentar la ingestión de aire, lo que puede provocar eructos.
• Consumo de alimentos y bebidas carbonatadas⁚ Las bebidas carbonatadas y los alimentos ricos en azúcares fermentables pueden aumentar la producción de gas en el estómago.
• Estrés⁚ El estrés puede afectar la digestión y aumentar la probabilidad de eructos.
• Embarazo⁚ El embarazo puede causar eructos debido a los cambios hormonales y la presión del útero en el estómago.
• Ciertos medicamentos⁚ Algunos medicamentos, como los antiácidos y los antidepresivos, pueden causar eructos como efecto secundario.

Control de los eructos

Si bien los eructos son un fenómeno natural, existen varias estrategias para controlarlos y reducir su frecuencia e intensidad⁚

• Comer despacio y masticar bien⁚ Comer lentamente y masticar bien los alimentos puede reducir la cantidad de aire que se traga.
• Evitar hablar mientras se come⁚ Hablar mientras se come puede aumentar la ingestión de aire, por lo que es mejor evitarlo.
• Evitar las bebidas carbonatadas⁚ Las bebidas carbonatadas contienen dióxido de carbono, que se libera como gas en el estómago y puede provocar eructos.
• Reducir el consumo de alimentos que producen gas⁚ Los alimentos como los frijoles, las coles de Bruselas y las cebollas pueden causar eructos debido a la fermentación bacteriana. Reducir el consumo de estos alimentos puede ayudar a controlar los eructos.
• Evitar el chicle⁚ Masticar chicle puede aumentar la ingestión de aire, lo que puede provocar eructos.
• Evitar las bebidas con pajita⁚ Usar una pajita para beber puede aumentar la ingestión de aire, por lo que es mejor evitarlo.
• Evitar la comida picante⁚ La comida picante puede irritar el estómago y aumentar la producción de ácido gástrico, lo que puede provocar eructos.
• Mantener un peso saludable⁚ El sobrepeso u la obesidad pueden aumentar la presión en el estómago, lo que puede provocar eructos.
• Evitar el estrés⁚ El estrés puede afectar la digestión y aumentar la probabilidad de eructos. Practicar técnicas de relajación como la meditación o el yoga puede ayudar a reducir el estrés.
• Evitar la ropa ajustada⁚ La ropa ajustada puede presionar el estómago y aumentar la presión, lo que puede provocar eructos.
• Elevar la cabeza durante el sueño⁚ Elevar la cabeza durante el sueño puede reducir la probabilidad de RGE, que puede causar eructos.
• Evitar fumar⁚ Fumar puede irritar el esófago y aumentar la probabilidad de RGE, lo que puede provocar eructos.

Cuándo consultar a un médico

Si los eructos son frecuentes, intensos o van acompañados de otros síntomas como dolor abdominal, náuseas, vómitos, pérdida de peso, sangre en las heces o dificultad para tragar, es importante consultar a un médico. Estos síntomas pueden indicar una condición médica subyacente que requiere atención médica.

Conclusión

Los eructos son un fenómeno fisiológico común que afecta a todos. Si bien los eructos suelen ser inofensivos, pueden ser incómodos y embarazosos en ciertos contextos. Comprender las causas, los mecanismos y los factores contribuyentes a los eructos puede ayudar a controlarlos y reducir su frecuencia e intensidad. Al adoptar estrategias como comer despacio, evitar las bebidas carbonatadas y reducir el estrés, las personas pueden minimizar la probabilidad de eructos. Si los eructos son frecuentes, intensos o van acompañados de otros síntomas, es importante consultar a un médico para descartar cualquier condición médica subyacente.